domingo, 30 de septiembre de 2007

CC.OO sempre amb Catisa



CC.OO reclama al Gobierno Balear negociar un Plan de Viabilidad para el sector Indutrial de Menorca


23/01/2005

Ramón Carreras, Secretario General de Comisiones Obreras, decía que no es posible que el Gobierno Autonómico se limite a firmar la defunción de las empresas que no han podido seguir adelante.

El Secretario General de Comisiones Obreras afirmaba que el Gobierno tiene una sensibilidad diferente cuando las empresas afectadas son de Mallorca y ponía como ejemplo el caso de Yanko o Majórica. Ramón Carreras matizaba que no se trata de dar ayudas porque sí, sino de preservar la actividad del sector industrial en unos momentos difíciles por culpa de la globalización.

Ramón Carreras respondía así a las palabras del Conseller de Industria Josep Juan Cardona, quien ve difícil poder ayudar a Catisa o a otras industrias de Baleares para favorecer que mantengan la producción en las Islas y evitar su deslocalización. El Secretario General de Comisiones Obreras decía que el Gobierno sí hacía trajes a medida para empresas de Mallorca.

Comisiones Obreras quiso felicitar a los trabajadores y al gerente de la empresa Catisa tras haber anunciado la compra del activo de la bisutera vasca Indagui y el traslado de su producción a Menorca. Según Ramón Carreras esto demuestra que Catisa es una empresa viable y que el problema de su crisis estaba provocado por una mala gerencia.

CATISA salva su futuro gracias a un acuerdo a tres bandas




Los trabajadores han retirado la querella criminal contra Puck Tower 2000, que a su vez ha renunciado a la demanda contra los propietarios del solar

Javi Morales.Maó

29/07/2004

Las sombras que planeaban sobre el futuro de la bisutera CATISA se despejaron el pasado lunes, cuando representantes de los trabajadores, Puck Tower 2000 S.L., y las familias Carretero y Timoner, propietarias del solar en el que se ubica la fábrica, llegaron a un acuerdo en los juzgados, según explicó ayer a este periódico el gerente de la empresa, Antoni Monserrat.

El acuerdo implica que los trabajadores de la fábrica retiran la querella criminal interpuesta contra Puck Tower 2000 S.L., sociedad que a su vez hace lo propio con la demanda contra los propietarios del solar, con la que se pretendía ejecutar la opción de compra sobre los terrenos, que había vendido a la entidad Josep Maria Drudis, empresario que se hizo cargo de la firma hasta mayo de 2001.

Monserrat explicó que con esta resolución en vigor, los antiguos gestores de CATISA, las familias Carretero y Timoner, vuelven a tener el "dominio total del solar de la fábrica", por lo que los 40 empleados de la firma no tienen ya que preocuparse por un posible desalojo de las instalaciones en las que han venido trabajando hasta ahora.

Lógicamente, despejadas las turbulencias comienza ahora una nueva etapa para CATISA, "como una empresa normal, con problemas normales", expuso Monserrat, quien reunió durante la mañana de ayer a los trabajadores en asamblea para exponerles la situación.

Traslado

Según el gerente, el trabajo ahora consiste en renegociar los plazos de devolución de la deuda acumulada por Drudis con la Agencia Tributaria, un asunto que comienza en estos momentos a estar "encarrilado". Además, las familias propietarias del solar se han comprometido con la gerencia a buscar, sin prisas y sin presiones, un nuevo emplazamiento adecuado en el que instalar la fábrica.

Monserrat expuso sus deseos de poder conseguir un espacio acorde con las necesidades de la empresa en el Polígono Industrial de Maó. "Con 2.000 metros cuadrados nos basta", aseguró. Actualmente, debido a las exageradas dimensiones del edificio, "se pierde capacidad productiva", afirmó el gerente.

En estos momentos, un ingeniero industrial ha comenzado un estudio interno para determinar los sistemas productivos, y para preparar un futuro traslado y la adquisición de nueva maquinaria. "Me consta que podremos tener respaldo financiero", confirmaba ayer Antoni Monserrat, quien se mostró aliviado al poder cerrar la etapa Drudis, "una mala historia".


Recuperar la fuerza de la fábrica


Para conseguir que la empresa recupere la fuerza que la caracterizó, Monserrat mostró ayer sus esperanzas de que el Govern se implique económicamente con CATISA, igual que en su momento hizo con la industria perlera mallorquina Majorica, protagonista también de momentos difíciles. Afirmó, además, que en el caso menorquín, "no se trata de ayudas para despidos, sino para puestos de trabajo"..

Por otro lado, el gerente de CATISA destacó la implicación de entidades ajenas a la empresa en el asunto con Puck Tower 2000 S.L., y que han ayudado a la resolución positiva del conflicto. Se refirió a los sindicatos CCOO y UGT, y al alcalde de Maó, Arturo Bagur. Monserrat tuvo también una mención especial para con Sa Nostra, entidad que ha sido decisiva en el acuerdo final.

domingo, 16 de septiembre de 2007

Unes paraules de l'amic Francesc

Ha mort un amic, ha mort una bona persona. Ha mort en Toni Monserrat
francesc
20 Febrer, 2006 11:32

Ha dir ver no recordo quan vaig conéixer a Toni Monserrat i Moll. Només sé que fa molts d'anys. Compartirem moltes curolles mediàtiques. Varen fundar el setmanari Noves, una iniciativa periodística en la qual estava embolicada una gran part de l'esquerra abans de les eleccions de 1999, però quan el Pacte de Progrés va entrar en el Consolat de la Mar una de les primers ordres en dictar va ser el tancar aquell projecte. Monserrat, ho havia advertit: "Ens convé divertir-nos perquè quan arribin al poder els obliagaren a oblidar-se de nosaltres. Quan li oferiren ocupar el càrrec de director general d'economia, va tenir molts de dubtes. Els amics el varem haver d'animar a acceptar-lo. L'argument no podia ser de més pes: "Almenys en tu allà hi haurà una mica de sentit de l'humor". Afortunadament ens va fer cas i en el seu despatx era l'únic lloc on es podia riure de debó.
Amb en Toni Monserrat, varen compartir el dolor per la pèrdua d'un altre amic. Pere Costa, el qual també ens va deixar prematurament. Pere, com Toni, sempre afrontaren la vida amb rialles i abans de partir ens fa fer prometre als que estavem a prop d'ell que no perdriem l'humor en el seu funeral. Durant la missa, Toni Monserrat va anar recordant tota i cadesquna de les anécdotes que haviem viscut amb en Pere Costa, fins el punt que no varen poder reprimir esclafir amb una forta riallada, amb el que això supossava en un acte com aquell. Em consta que ara, Monserrat, espera el mateix tracte per a ell.
Així era amb els amics, en la seva vesant professional, Toni Monserrat, com economista, no només va impedir la fallida de l'escola Skal de Magalluf, sinó que des d'una perspectiva local va aconseguir recuperar la fàbrica bijutera Catisa de Menorca. Ell sempre presumia de que amb voluntat els mallorquins, menorquins i evissencs teniem prou capacitat per enfrontar-se a les grans multinacionals a aquells que havien acabat per enfonsar a Majorica, Yanko i tantes i tantes históriques iniciatives empresarials de les Illes.
Toni Monserrat també va tenir la capacitat en els seus estudis i informes económics deixar en evidència a aquells sectors caciquils que impedeixen avançar la nostra terra. Els cacics, obiviament mai varen entendre allò que els hi reproxava Monserrat. Era d'esquerres, però estimava tant a Mallorca que que va voler participar de la idea de fer una nació de la nostra terra. Inclús hi va haver una època que va voler humanitzar a Jaume Matas i quasi ho aconsegueix quan ambdos compartien feina en el departament que dirigia l'heterodoxe Alexandre Forcades. Aquest darrer, va ser però, potser, l'únic fracas de Monserrat...

http://francesc.balearweb.net

Transllat de Catisa a Poima. Un projecte d'en Toni, assolit.








La empresa bisutera mahonesa tiene previsto trasladar en septiembre su producción a una nave de 2.200 metros cuadrados que se levanta en la actualidad en POIMA
Una imagen virtual del aspecto exterior que tendrán las nuevas dependencias de la empresa bisutera CATISA
Las modernas instalaciones dispondrán de dos plantas y en ellas se ubicará, además de las oficinas y los departamentos comercial y de diseño, la maquinaria de última tecnología adquirida recientemente a la empresa vasca Industrias Aguinagalde, INDAGUI.
A.M.O.



CATISA tiene previsto trasladar en septiembre su producción a una nueva nave de 2.200 metros cuadrados que se levanta en el Polígono Industrial de Maó. De esta forma, la firma bisutera da un paso más para desarrollar sus aspiraciones de modernización, después de hacer frente a su deuda histórica y la reciente compra de los activos de la empresa vasca del sector, Industrias Aguinagalde, INDAGUI.


La nave es propiedad de Guillermo Gardés y CATISA la ocupará en régimen de alquiler, a la espera de que termine la ampliación de la IV fase de POIMA, donde ya estudia la compra de una parcela. "Las instalaciones disponen de la última tecnología en términos medioambientales y de racionalización de producción", explicó ayer Antoni Monserrat, el gerente de CATISA y ex director general de Economía del Govern. Aunque aún no se ha firmado el contrato de alquiler, la nave se está construyendo en función de las necesidades de la empresa bisutera:"La cuantía dependerá de las inversiones que hagamos también nosotros", comentó. Según los primeros bocetos, las instalaciones dispondrán de dos plantas; en la primera se ubicarán las oficinas, el departamento comercial y el área de diseño, y en la planta baja se instalará la maquinaria. Precisamente, en este lugar se buscará acomodo a la moderna maquinaria de alta tecnología adquirida este año a INDAGUI, lo que permitirá consolidar la producción actual. De momento, todo este material se encuentra en un almacén de 700 metros cuadrados, frente a la nueva nave. "En un futuro esa nave nos servirá para almacenar materias primas", indicó Monserrat. Incluso, existe el compromiso con un antiguo accionista, Antoni Roselló, para utilizar una parcela de 1.000 metros cuadrados de su propiedad, ubicada junto a estas naves.


"El futuro es invertir en tecnología y diseño"
Antoni Monserrat aseguró que los trabajadores se encuentran ilusionados por este inminente cambio. "Después de pasar cinco años esperando el día del cierre, ver que la empresa se consolida es una satisfacción", comentó. Una consolidación a la que contribuye la adquisición de la cartera de clientes de INDAGUI. En la actualidad, la entidad cuenta con 40 trabajadores, con un incremento de plantilla en el último año de un 14 por cien. Monserrat reconoce la dificultad del mercado bisutero ante la fuerte competencia asiática y advierte, "el único futuro posible es invertir en tecnología y diseño".

Toni, president de l'ITEB




18/09/2005


Los bisuteros apuestan por la tecnología frente al empuje chino
La feria internacional de Euro-Bijoux que se celebra desde el viernes en el pabellón de la Pipa de Madrid y a la que asistente 41 empresas de Balears (36 de Menorca y 5 de Mallorca) vivió ayer su penúltima jornada. Aunque aún es pronto para hacer balance, la mayoría de los expositores isleños presentes en la capital reconocieron una leve mejoría de las ventas. Euro-Bijoux, el escaparate donde los bisuteros isleños muestran sus últimos productos, se ha convertido también en un foro que pone en evidencia la incertidumbre del mercado nacional frente al pujante sector bisutero chino. Para luchar contra la "feroz" competencia asiática de bajos precios según señaló ayer el presidente de SEBIME, Matthias Roters, es importante invertir en nuevas tecnologías, calidad, diseño e innovación. Por este motivo, el sector bisutero balear trabaja ya en dos frentes. El primero pretende reforzar el protagonismo del ITEB (Institut Tecnològic de la Bijuteria), organismo que será "esencial" en un futuro próximo para el abaratamiento de costes de producción, en opinión del conseller de Comercio, Industria y Energía Josep Juan Cardona que ayer visitó la feria. El presidente del ITEB, Antoni Monserrat, reconoció también que este instituto pretende introducir en Balears la tecnología más avanzada existente hoy día en el sector, similar a la que utiliza la Fórmula 1 para fabricar piezas de motores, la "sintetización de metal con láser". Esta ambiciosa estrategia de trabajo cuenta ya con el apoyo de las administraciones central y autonómica. En los próximos seis meses está previsto invertir 240.000 euros, con el objetivo de llegar en un plazo de 2 a 3 años a una inversión en alta tecnología que rondaría los 1.200.000 euros principalmente través de fondos europeos. "Los fabricantes conseguirían moldes perfectos de forma más rápida y a bajo coste. El mercado asiático tardará más en ofrecer el servicio y la imitación será más difícil", explicó.

Entrevista a en Toni: Catisa, un projecte personal








Entrevista a Antoni Montserrat"Catisa cerrará el año 2004 con beneficios"
Compromiso. El reto de Montserrat es enderezar Catisa
El nuevo director se propone relanzar la fábrica y darle justa estructura productiva
I.R.A..Maó
Antoni Montserrat Moll (49) acaba de iniciar este mes de septiembre su particular curso profesional como nuevo director de la empresa Catisa de bisutería.
Caprichos del azar, nació el mismo año en que se fundaba la empresa en Maó, pero fue sobre todo en su etapa como director general de Economía del Govern, cuando conoció los intríngulis de oscuras maniobras de traspaso de una empresa asentada en un solar más que codiciable.
Economista de profesión, especialista como es en cuestiones internas de empresa, se ha propuesto como reto personal el reflotamiento de la que ha sido una de las fábricas de más peso social dentro de la industria bisutera menorquina.
Durante la celebración de la feria Euro-Bijoux este fin de semana, Montserrat le ha tomado el pulso a las posibilidades de la empresa y su conclusión tiene signo positivo, hay base para la confianza.
­ Usted que está de estreno, ¿en qué situación ha encontrado la empresa después de los avatares a la que se ha visto sometida en los últimos años?
­ Catisa ha superado la gran crisis por la que atravesó. Está consiguiendo estabilizarse y ha tenido la gran suerte de la estructura humana sobre la que se apoya y que está muy equilibrada.
­ ¿Qué dimensiones tiene la plantilla actual?
­ La misma que en los últimos años, 37 personas, una más conmigo. El anterior propietario optó por una reestructuración importante, que provocó unas pérdidas enormes. En estos momentos no hay necesidad de reducir plantilla.
­ ¿Intuye, por tanto, buenas perspectivas para la marcha de la fábrica?
­ Así es. A pesar de que la situación general es complicada, tal y como van las ventas, no hay razones para reducir plantilla. En este trimestre habrá que abordar un plan de mejoras y ciertos cambios, pero yo diría que está bien encauzada y confío en que el año 2004 será mejor. Hasta es posible que necesitemos contratar a una o dos personas.
­ ¿Aires de continuidad?
­ En mi caso, que he conocido los datos desde otra perspectiva, creo que la empresa tiene posibilidades. A pesar de la gran losa y de los problemas con que carga esta empresa, heredados de etapas anteriores.
­ Una empresa con historia...
­ En 2004 va a cumplir 50 años. Y confiamos en poder celebrarlo.
­ ¿En la misma planta de producción?
­ Ahí estaremos mientras no haya un acuerdo con todos los implicados. Que para trasladar la planta siempre habrá tiempo.
­ ¿Qué hay de la propiedad?
­ La titularidad de la empresa es de sus antiguos propietarios, las familias Carretero y Timoner, que firmaron una opción de compra a favor de José María Drudis. Los trabajadores denunciaron a este último por estafa.
­ Está bien que recuerde el
caso...
­ Durante su etapa no hizo inversiones según era su compromiso, provocó una serie de pérdidas importantes. Pero encima había conseguido la opción de compra.
­ ¿En qué punto se encuentran los procesos judiciales abiertos?
­ Hay interpuesta una querella judicial por presunta estafa, que ya ha sido admitida a trámite y que en estos momentos se encuentra en fase de tomar declaraciones. El propio Drudis, entre otros, tendrá que ir a declarar este mismo mes en Barcelona. Entretanto, en Menorca, ya han ido a declarar diferentes personas, como Miquel Carretero...
­ ¿En defensa de sus intereses?
­ Es que los intereses de los antiguos propietarios coinciden con los de los trabajadores. Ellos también consideran que fueron estafados.
­ ¿Porque Drudis no cumplió sus compromisos de dar continuidad a la fábrica?
­ Claro, se había comprometido a invertir 180 millones de pesetas, relanzar la empresa y no hizo nada de eso.
­ Por tanto, los fundadores denuncian el incumplimiento de unos acuerdos que es lo que daba acceso a la compra de la fábrica por Drudis.
­ Eso es, sostienen que fue una operación fraudulenta montada única y exclusivamente para pegar un "pelotazo" inmobiliario.
­ Grande.
­ ¡Muy grande!
­ ¿Cuántos metros debe tener el local?
­ No lo sé, pero hablamos de una operación de muchos millones.
­ Ya, si es que es la manzana de oro de Maó.
­ Exactamente, era una operación redonda y lo peor de todo es que iba a ser un pelotazo a cambio de que 80 familias se quedaran en la calle. Porque antes hubo un despido de 40 personas, sin que Drudis hiciera ninguna aportación. Todavía en estos momentos Catisa está pagando a FOGASA, el Fondo de Garantía Salarial del Govern, aquel despido. O sea, algo impresentable desde el punto de vista ético.
­ ¿Qué se sabe de aquella sociedad interpuesta, que apareció en un momento del caso?
­ Sí, la empresa Put Towers, una empresa domiciliada en las Antillas holandesas, totalmente opaca, que no se sabe quién organizó, aunque cunde la sensación de que fue el propio Drudis quien la montó. Pero este asunto, su composición, está bajo secreto sumarial.
­ Esto es un culebrón. Hombres de paja...
­ Y sigue. Porque después lo vendió al actual propietario, Enric Perera, por una peseta. Una operación para que lo cerrara. Ahí es donde falló, porque la empresa continúa a pesar de que lo que se pretendía era una liquidación rápida y problemas fuera.
­ ¿Quién y cuándo le hizo a usted el ofrecimiento de dirigir Catisa?
­ Esto fue a finales de julio. Me lo ofrecieron los trabajadores.
­ ¿Sistema cooperativo?
­ No, la empresa sigue perteneciendo a Perera, pero el comité de dirección llegó a un pacto por el que es el mismo comité el que toma las decisiones. Perera interviene en algunas operaciones, en buena lógica de representación legal, pero no tiene nada que ver desde el punto de vista productivo.
­ ¿Tiene "el dueño" interés por la empresa o no?
­ Ha tenido problemas de salud y hace tiempo que había estado. Pero sí conserva interés. Además, tiene un documento firmado por el cual vende en cualquier momento la empresa a los trabajadores por una peseta.
­ Ahora ya serían fracciones de céntimo de euro, ¡una ganga!
­ Mi recomendación a los trabajadores ha sido siempre no aceptar ese traspaso hasta que no esté todo claro. Lo que no haremos va a ser cargar con unas responsabilidades que no nos corresponden. Es decir, el agujero económico, las posibles deudas, no han eclosionado aún.
­ No vaya a ser que les salga cara la peseta.
­ Porque de no ir con cautelas, aún resultará que se pueden librar de las pérdidas actuales.
­ ¿La empresa es eminentemente exportadora?
­ No, tiene exportaciones pero vende por toda España. Tiene una cartera de clientes muy sólida y muy diversificada. Lo he podido comprobarlo estos días en Euro-Bijoux. Me ha sorprendido, precisamente, el bajo nivel de impagados. Por tanto las pérdidas no vienen por aquí.
­ Está bien encauzada, entonces.
­ Sí lo está. Ha de mejorar la organización, pero es una empresa que tiene unas posibilidades enormes. Y puede recuperar el peso que siempre tuvo y tiene aún. Con casi 40 trabajadores de mano directa, con una trayectoria de casi 50 años, tiene un saber hacer y una capacidad muy elevada.
­ ¿Daría alguna cifra de facturación?
­ No por ahora, pero puedo asegurar que el año que viene esta empresa entrará en beneficios. Eso pretendo.
­ ¿No es grande su osadía?
­ Es un reto muy importante. Es lo que ha hecho que yo viniera aquí. Porque Catisa tiene unas connotaciones sociológicas muy importantes. Y hay un equipo de trabajadores, con unas ganas de que eso funcione, que impresiona.
­ ¿Dirigirá la empresa desde Menorca?
­ Aquí, sí. En Mallorca tengo mi despacho abierto y ya he rechazado trabajos porque para mí ahora la prioridad es Catisa.
­ ¿Y su contrato, cuánto dura? Porque el entusiasmo asomaba también en los inicios de la etapa Drudis.
­ Mi intención es muy sencilla: conseguir que Catisa se sitúe. El problema está con Seguridad Social y Hacienda, que en lo que se refiere a plantilla y proveedores hay estabilidad. Por tanto, mi intención no es quedarme, sino lanzar la empresa, proporcionarle una estructura nueva. Después me voy. Mi especialidad no es la gestión cotidiana, sino las situaciones difíciles.
­ ¡Vaya un compromiso!
­ Lo es. Mientras Catisa tenga problemas, me tendrán aquí.
­ ¿Cuándo cree que puede producirse el desenlace de este proceso?
­ Uno de estas características puede durar de tres a cinco años.
­ ¿La resolución judicial?
­ Me refiero a enderezar el rumbo. Cerrar con beneficios, pero tener estructuras consolidadas. Siempre y cuando el mercado responda y no haya 11-S, etcétera. Los procedimientos judiciales son largos.
­ La pregunta apunta a la previsión de un traslado de local.
­ Espero que la parte contraria se avenga a razones y se llegue a un acuerdo.
­ Con tanto en juego, parece que hay margen para pactar.
­ Yo, en su caso, buscaría el acuerdo.
­ ¿Han mirado locales alternativos?
­ Empezaremos a hacerlo.
­ ¿Qué espacio necesita la nueva Catisa?
­ Depende de cómo funcione el mercado, pero muy inferior al actual. Que lo de ahora es excesivo, casi insostenible y complica la gestión.
­ Sería muy bonito llegar a un acuerdo con la propiedad para un 50 cumpleaños feliz.
­ Sería precioso.

Poema dedicat per un amic

Antoni Monserrat Moll Excel.lent sindicaliasta millor economista
Enviat el Dissabte, 25 febrer a les 23:00:00 per Cromelnordic

Moncaira va escriure "Aquest humil i insignificant poema va dedicat a recordar la memòria de l'economista mallorqui Antoni Monserrat Moll - que fou Director d'Economia del Govern de les Illes en temps del "Pacte de Progrés" - que acaba de morir als 51 anys. Era en l'actualitat director gerent de Catisa i president d'ITBE. Descansi en pau l'excel.lent sindicalista dels anys setanta i vuitanta que a Mallorca vaig conèixer per la vall de Sóller.

Avui has mort,
aquest 20 de febrer,
tu bon coneixedor de ta sort
i home que queia en gràcia
i era, ell, ben feiner.

En els anys de mà dura,
quan aquella dictadura,
fores excel·lent sindicalista.

Ara amb la Democracia
millor economista
ell has estat;
i ningu s'erra
tant a dreta com esquerra,
qui ho firma
i per tant ho afirma
que ho tenim comprovat!

Adéu, Toni, benvolgut!
Com a home ponderat,
un mallorqui que t'ha conegut,
de tu, sempre, s'enrecordarà
i ell, mai de la vida,
ton record enviarà a dida
sino sempre el conservarà.

Palma de Mallorca 21 de febrer de 2006

http://lastoa.cat/modules.php?name=News&file=article&sid=967


Escrit d'un amic d'en Toni, en Llorenç Buades

Antoni Monserrat Moll en la meva memòria

Llorenç Buades i Castell

Vaig ser amic d’Antoni Monserrat ,camarada en el PCE a les Illes, company de sindicat,a les antigues Comissions Obreres, i també de sopars i copes els dissabtes a la nit. El vaig conèixer el dia de la legalització del PCE. Aquell dia sortirem junts amb el fulard vermell amb la falç i el martell a vendre el Mundo Obrero pels carrers de Ciutat, i després, en el dinar del partit a Manacor,on compartirem estovalles amb en Maties, el taxista petrer. Aleshores no era director d’economia i vivia en un xibiu del carrer Conquistador carregat de llibres perquè havia organitzat una mena de cooperativa o xarxa de distribució de llibres per als universitaris. Aquell apartament era tot el que tenia, a més d’un fill compartit amb la seva antiga companya, militant primer de l’OEC (Organització d’Esquerra Comunista) i després del PORE (Partit Obrer Revolucionari d’Espanya).

Quan el vaig conèixer acabava d’aterrar al PCE provinent del Moviment Comunista (MC) i en un moment de crisi personal aguda derivada de la seva separació.

Aleshores ell estava enganxat als menjars de La Trattoria del carrer del Tinent Torres, a prop del Zhivago, la discoteca on ens deixàvem caure a vegades. A la Trattoria li feien compte mensual, i no menjava prou com per alimentar el seu cuc solitari. Un dia va arribar als set plats de raviolis a la nata i estava magre com una canya. Pels nervis ?. No dormia.

Ell, que havia estat un dels que van posar en marxa el corrent unitari de les CC.OO., que dominava sindicalment el sector de les benzineres, on havia treballat, es passava les nits al local del carrer Navarra davant el Teatre Principal de Ciutat. Era el contable del sindicat, però també en les seves hores extra bastia estadístiques sobre l’atur a les Balears fin que el cos no aguantava i recobrava la serenor necessària per al mal moment emocional que vivia. Però la processó anava alehores per dedins i sempre es mostrava amigable i considerat amb la gent.

Amb el pas del temps les nostres diferències polítiques augmentaren. Ell sostenia els Pactes de la Moncloa, i jo no, però el fet de separar-nos políticament (jo vaig entrar a la LCR) no va minvar en absolut la nostra amistat. Ell era aleshores eurocomunista i jo havia evolucionat cap al trotsquisme, però això no ens impedia d’anar plegats i de marxa amb altres companys. Mai no va ser un sectari i ens aveniem malgrat les divergències polítiques.

Més tard, i al mateix sindicat, Antoni va trobar la persona que necessitava per a la seva estabilitat emocional: ja no ens trobàrem els dissabtes .Es trobava millor amb la seva companya i en la cria de canaris a la terrassa del seu pis a una travessia de General Riera.

Un dia va entrar en conflicte amb l’aparell de CC.OO.. No era un conflicte polític, sinó en relació a l’ús de les estadístiques que treballava. Aquest conflicte va significar el trencament de la seva vida laboral en el sindicat, i la cerca de nous camins.

Diuen que la distància condueix a l’oblit, i efectivament, poc puc dir de l’Antoni Monserrat al servei del govern de progrés. En qualsevol cas, l’Antoni que em plau recordar és el més proper a mí, el dels anys 1976 a 1980.

Ara ell ha partit, i la seva pèrdua ho és també nostra.

Descansi en pau.

Catisa compra Indagui




SOCIEDAD (Fecha 23 de Enero de 2005 · Número 542 · Año VIII)
Catisa compra una empresa vasca. Catisa ha adquirido el activo de la empresa vasca Indagui y traerá a Menorca su producción de bisutería, objetos de regalo y fornituras. La operación se cerraba hace pocos días por más de 180.000 euros con el apoyo financiero de "Sa Nostra" y la desvelaba el Gerente de Catisa, Antonio Montserrat. De esta manera Catisa refuerza su posición económica y da por superada la crisis vivida en los últimos años. Estaba previsto que en estos días se trasladase la maquinaria de la empresa Indagui hasta Menorca. La operación podría implicar un aumento de la plantilla de Catisa; alrededor de un 20%. Esta empresa, Indagui, tenía su sede social en el País Vasco, donde fue fundada en 1912 y era considerada como un referente en España en la producción de fornitura. Pero recientemente tuvo que cerrar por quiebra. Ahora su activo ha sido adquirido por Catisa. Antonio Montserrat destacaba la importancia de esta operación en un contexto difícil para el Sector de la Bisutería en toda Europa. Un ejemplo nos queda muy cerca, con Majórica. En cuanto al traslado de la fábrica, Antonio Montserrat informaba de que era inminente. La venta de los actuales locales está a punto de cerrarse, pero hay problemas para encontrar un solar en Mahón. Mientras tanto, la situación financiera de la empresa ha podido estabilizarse y hace poco se cerraba un acuerdo con Seguridad Social para pagar la deuda. También se está a punto de hacer lo mismo con la deuda con Hacienda.

sábado, 15 de septiembre de 2007

Catisa dona maquinària antiga a Maó

CATISA regala su antigua maquinaria de bisutería para preservar el patrimonio industrial de Maó

13 de marzo de 2007

Fuente: http://www.menorca.info/20070224/insular/2insular.html
La antigua fábrica de CATISA fue derruida hace unos meses, una vez trasladada su sede al Polígono Industrial de Maó. Aunque el edificio se derruyó por completo, la maquinaria que había en su interior fue "indultada" para que las futuras generaciones tengan una referencia de los orígenes de la bisutería en Menorca, una industria que si bien ha gozado de mejores tiempos, conforma aún una parte importante del sector industrial de la Isla.

Pau Montserrat y Javier Borbolla, ambos responsables de la actual empresa CATISA, protagonizaron ayer el acto de la donación ante el conseller de Educación y Cultura del Consell, Manel Martí; el comandante militar de Menorca, el coronel Francisco Riva Mayor; y la representante de SEBIME Carmen Lozano. Un acto que fue breve pero emotivo, puesto que se recordó la figura del malogrado Antoni Montserrat, quien antes de fallecer había expresado su voluntad de conservar todo este material que ahora se ha cedido como patrimonio histórico industrial de Menorca.

Manel Martí recordó en este contexto que la Ley de Patrimonio Histórico de Bienes muebles e inmuebles recoge la definición de patrimonio industrial como aquellos enseres que son útiles para su estudio y, a su vez, no son susceptibles de ser utilizados más por obsoletos. Aun así, hay que señalar que la mayoría de máquinas cedidas funciona aún a la perfección.

De momento todo este material queda depositado en un almacén del recinto militar de San Felipe, en Es Castell, gracias a una colaboración del Ejército. Todo ello hasta que SEBIME no haya construido el futuro Museo de la Bisutería, que se levantará junto a las nuevas instalaciones de la asociación empresarial, y que previsiblemente se ubicará en un solar de la calle Curniola del Polígono Industrial de Maó. En este sentido, la representante de SEBIME Carme Lozano manifestó que ya se está trabajando en el diseño arquitectónico del edificio.

Inventario. Torno 180 Ausona (años 50); pantógrafo Premeta SL. de Erandio, Bilbao; una limadora Codeme L 350; máquina de horadar de sobremesa Delfos; sierra de arco mecánica de vaivén Uniz; máquina inyectora de plástico Mateu 6 Solé I.H. 70.A; torno revólver manual Elgo; prensa excéntrica 25 Tn Ulecia, con silla serie 1842; prensa excéntrica Quadrado 10 Tn; máquina de pulir automatizada (años 80); prensa excéntrica transfer; máquina inyectora de cámara caliente de Zamak Alex Frech (1970); tabla para roscas de módulo Ausona; máquina pequeña de hacer cadenas; máquina pequeña Graphiell; un cuadro eléctrico I.A. 70; sillas del teatro; mesa de oficina de diseño, rueda roja, rueda gris, bancos de trabajo Iram y tres sillas

Drudis, el gran estafador

Noticia de El Mundo


Miércoles, 2 de abril de 2003.
Actualizado a las 01:01

MENORCA
Drudis niega cualquier responsabilidad en el cierre de la fábrica
bisutera Catisa

Califica de «barbaridad» que los empleados quieran demandarle
por delito societario - Vendió la empresa por un euro y la opción
de compra del solar por 126.000


M.A. RUIZ

MAÓ.— El empresario catalán Josep María Drudis calificó ayer de
«auténtica barbaridad» las acusaciones de los trabajadores de
Catisa, quienes sostienen que incumplió sus compromisos de
inversión yvendió la fábrica bisutera para favorecer una operación
urbanística sobre los terrenos.

La empresa se verá obligada a echar el cierre antes del próximo
3 de mayo si la promotora Puck Tower 2000, de capital holandés,
mantiene su voluntad de ejecutar la opción de compra que adquirió
a Drudis el 24 de octubre de 2000 sobre el inmueble. Sus planes
pasan por derribar la fábrica para construir sobre el solar una
manzana de 91 viviendas, con una inversión de 9 millones de euros.

El director general de Economía del Govern, Antoni Montserrat,
anunció el lunes que los trabajadores de Catisa tienen intención de
demandar a Drudis por un presunto delito societario. A su juicio, el
proceso «tiene todos los elementos de una operación especulativa.
Todo estaba dirigido a que Catisa cerrara en 2002».

Josep María Drudis se mostró ayer «alucinado» por estas
acusaciones.«Cuando compré Catisa en 1999», indicó en
declaraciones a EL MUNDO/El Día de Baleares, «se encontraba en
una situación deplorable».
De hecho, la empresa arrastraba en aquellos momentos deudas por
importe de 300.000 euros, que se habían duplicado cuando, dos
años después, la traspasó a Enric Perera al precio de una peseta
por acción.

«Luchamos para que la empresa funcionara, porque mi intención
era tenerla toda la vida, pero se me cruzaron unos señores», añade
Drudisen referencia a los socios de Enric Perera, «a los que interesaba
la fábrica»,supuestamente para elaborar complementos de joyería.
«Otra cosa es que luego se pelearan entre ellos y dejaran a Perera
solo. Si yo vendo un coche y el nuevo dueño lo estrella contra un
árbol, no me pueden echar a mí la culpa del accidente», concluye el
empresario catalán.
Las instalaciones de la fábrica están ubicadas mediante un contrato
de alquiler sobre un solar de 5.300 metros cuadrados, en una zona
residencial de Maó, propiedad de las familias Timoner, Carretero,
Rosselló y Gomila, fundadoras de esta emblemática industria.

Cuando Drudis les compró la empresa, el 3 de mayo de 1999,
también adquirió por 216.364 euros una opción de compra sobre
los terrenos,como anticipo de un precio total de 1,2 millones de euros
(200 millones de pesetas). Aunque en el contrato se hizo constar
expresamente que no podía traspasar la opción de compra a
terceros,Drudis la vendió a Puck Tower 2000 el 24 de octubre de
2000.
Significativamente, la operación se escrituró en 126.212 euros,
90.152 menos de los que él había pagado un año antes. Tan sólo
24 horas antes, los fundadores de Catisa modificaron las condiciones
del acuerdo autorizándole a traspasar la opción de compra.

En cualquier caso, Drudis asegura que reinvirtió en la propia
empresa los beneficios obtenidos en la operación para resolver los
problemas de liquidez y pagar a los acreedores. El hecho de que
vendiera luegola sociedad al precio de una peseta por acción,
mientras que el precio del inmueble y el solar se ha fijado en 1,2
millones de euros, es la mejor prueba de que el valor urbanístico
de los terrenos es infinitamente superior a la rentabilidad de esta
industria.

Su actual titular, Enric Perera, no tiene ninguna experiencia en
el sector de la bisutería, sino que procede del negocio inmobiliario:
es administrador solidario de varias agencias de la propiedad en
Valencia y Alicante.

Catisa abans d'en Toni

Jueves, 14 de Junio de 2001
MENORCA

La imagen de marca y la caída de ventas en Europa, puntos negros de la bisuteria
Un estudio del Govern propone seis acciones para revitalizar el sector

g.m.

MAÓ.— La ausencia de una imagen de marca reconocible a nivel nacional e internacional y la caída de las ventas en los mercados tradicionales son los principales puntos negros que padece el sector bisutero de Menorca, según un estudio realizado por la empresa KPMG Consulting encargado por el Instituto de Innovación Empresarial (IDI), dependiente de la Conselleria autonómica de Economía, Comercio e Industria.

En palabras del conseller de Economía, Pere Sampol, el estudio es una radiografía del estado del sector de la bisutería de Menorca, a la vez que presenta una serie de propuestas para mejorar sus prestaciones.

Según la directora de KPMG Consulting, Ana Andueza, el estudio ha identificado 33 propuestas a corto, medio y largo plazo, de las que seis son prioritarias.

La primera es la ya mencionada carencia de una marca del sector reconocible a nivel nacional e internacional. La segunda pasa por potenciar nuevas formas de comercialización y promoción de los productos. Sobre este punto, el análisis revela que las acciones tradicionales de Sebime mediante la asistencia y organización de ferias como Euro-Bijoux son «decisivas, pero insuficientes». De hecho, Andueza remarcó que los mercados europeos, tradicionales en el circuito bisutero, están registrando un descenso en las ventas.

El acceso a las nuevas tecnologías, la cooperación empresarial, la revisión de los programas de estudio de los centros de formación y la creación de talleres que den soporte a la industria bisutera con una mayor especialización y profesionalización, constituyen el resto de las seis acciones propuestas en el estudio.

En el análisis, que ha durado siete meses, han participado 44 empresas del sector. El estudio ha establecido grupos de trabajo en las áreas de innovación, comercialización y promoción o profesionalización entre otras, con el objetivo de seleccionar las propuestas que puedan aportar una mayor competitividad.

Una vez presentado este estudio, las empresas del sector en colaboración con la Conselleria de Economía, Comercio e Industria deben analizar las conclusiones del trabajo para comprobar si es posible incluirlas en los sistemas laborales de la firmas. Posteriormente, la Conselleria tendrá que cuantificar los recursos económicos que destinará al sector para asumir estas propuestas de mejora.

Solución de Catisa

Los consellers de Trabajo y Formación y Economía, Comercio e Industria, Eberhard Grosske y Pere Sampol, respectivamente firmaron ayer en las dependencias de Sebime, en el polígono industrial de Maó, un protocolo de intenciones del Govern balear por el que se compromete a «garantizar la continuidad de Catisa» haciendo frente a los pagos inmediatos que tiene pendiente la firma.

Desde la Comunidad Autónoma se afirmó que esta cantidad no superaría los 60 millones de pesetas.

Sin embargo, Catisa tiene que hacer frente a una deuda que asciende a los 100 millones en concepto de débitos a proveedores mayoritarios y minoritarios.

El actual propietario de la fábrica, Enric Parera compró Catisa a principios de mayo con promesas de ampliación de la producción a la bisutería de alta calidad. Varias semanas después anunció públicamente que no disponía de capital suficiente para hacer frente a los pagos.

Perera se ha comprometido con los sindicatos a ceder sus acciones a los trabajadores de la empresa a un precio simbólico, según éstos. Sampol quiso ayer transmitir un mensaje de tranquilidad a los trabajadores y clientes de la fábrica al afirmar que Catisa «no está en una situación difícil». Es mas, según Sampol, el nivel de facturación de este mes es superior al del año pasado.

Para el conseller Catisa cuenta con activos importantes como son una plantilla «altamente cualificada e implicada con la empresa» y una amplia cartera de clientes que asegura su futuro. Según los sindicatos, Perera hará efectiva la opción de compra de las acciones de Catisa en el plazo máximo de tres meses.

El representante de UGT en Menorca, José Reyes, afirmó ayer que la mayoría de los trabajadores ha mostrado su disposición a dirigir la empresa mediante una cooperativa en la que todos dispongan del mismo número de acciones. Ambos sindicatos mostraron su disposición a aclarar el asunto, a pesar de la intervención de la Administración.

Mor Antoni Monserrat. Es Diari Digital




Muere Antoni Montserrat, gerente de Catisa.

El día 20 la crónica informativa tenía nombre propio; el de Antoni Montserrat, el ex Director General de Economía en la legislatura anterior del Pacto de Progreso. Antoni Montserrat moría el día 19, tras habérsele diagnosticado recientemente una enfermedad.

Actualmente presidía el Instituto Tecnológico de la Bisutería y era también Gerente de la empresa bisutera Catisa, que consiguió reavivar y que está previsto que en una o dos semanas abra instalaciones nuevas en Mahón.

Como Director General de Economía, Antoni Montserrat impulsó el Instituto Balear de Estadística y también tuvo un papel muy destacado como asesor laboral en el Sector de la Aviación.

jueves, 13 de septiembre de 2007

Empreses que fan país




Empreses que fan país

A a la sala de cultura de Sa Nostra a Maó podeu visitar durant aquest mes una interessantíssima exposició sobre la trajectòria cinquantenària de la fàbrica de bijuteria Catisa. El millor de l’exposició és que aconsegueix traslladar al visitant l’impacte social que aquesta emblemàtica empresa ha tingut sobre la societat menorquina, més enllà de la seva indubtable importància en termes estrictament econòmics.En els seus anys de màxima esplendor —des de mitjan dècada dels 60 fins a finals dels 70—, Catisa va ser un exemple paradigmàtic de fordisme social: la consideració de l’empresa com una gran família que ha de cohesionar els seus treballadors oferint-los serveis i espais de consum, cultura i oci. De fet, el cofundador i gerent de Catisa durant més de tres dècades, Rafel Timoner, al cel sia, fou un entusiasta del model de les empreses familiars nord-americanes típicament fordistes. Sota la seva batuta, Catisa va impulsar realitzacions pioneres com la construcció d’habitatges per als seus treballadors, un club de bàsquet, un equip de rem, un grup excursionista, un club social, un grup de teatre i música, una guarderia infantil per als fills dels treballadors, un festival de la joguina per a la campanya de Reis, cursos i procediments de prevenció i salut laboral... i un inacabable etcètera. Des de la perspectiva d’avui, algunes iniciatives d’aquella Catisa podran semblar paternalistes, excessives o passades de voltes, però no hi ha dubte que en el seu moment representaren una contribució notable a la vertebració i socialització d’un col·lectiu obrer que, des de l’anèmia social i cultural del franquisme, s’obriria camí per arribar a la transició democràtica amb un bagatge apreciable de cultura, comunicació social, esport i treball en equip, experiència en educació de l’oci i el lleure dels joves, etc, experiència que molts posarien després al servei de diversos grups i organitzacions de la societat civil menorquina.
D’acord, aquell model de l’empresa concebuda gairebé com una extensió de la família avui ja no és practicable. Però sí que continua tenint sentit la reivindicació d’unes empreses que no es mirin només els balanços i els comptes de resultats, sinó que vetllin per fer una aportació social constructiva, que s’esmercin per contribuir a la vertebració de la societat, que no sols donin treball i beneficis econòmics, sinó també beneficis socials. Açò és el que en termes actuals anomenam «responsabilitat social de les empreses», que amb nous patrons desenvolupen iniciatives tan interessants i punteres com Eticentre a Mallorca. En el fons, aquestes iniciatives se situen en continuïtat amb l’estela deixada en un passat recent per empreses com Catisa.
Per contra, el model d’empresa i de negoci que més s’ha afavorit a les Illes Balears durant els darrers anys, àdhuc des dels poders públics, no té res a veure amb aquest model. Més aviat ha caminat en sentit invers. El desembarc de multinacionals, la facilitació de l’entrada de grans empreses foranes en el mercat balear, la progressiva «franquicització» del comerç, no han empès precisament en un sentit de creació de beneficis socials, ben bé al contrari. Seria desitjable que l’exposició sobre Catisa no fos una simple invitació a la nostàlgia, sinó que ajudàs a pensar i imaginar de quina manera les empreses illenques d’avui poden fer allò que, en la seva època, van fer Catisa i altres empreses: fer país, fer societat, fer créixer i madurar un projecte productiu viable i exitós tant des del punt de vista econòmic com social. Perquè açò és, en el fons, crear autèntica riquesa, i no fer duros a la brava.
Miquel A. Maria. Professor

Ultima Hora i l'exposició de Catisa




El hueco que dejó Catisa en Maó: Una reflexión sobre la evolución de la ciudad

J.M.M.En un acto que resultó emotivo fue inaugurada anoche la exposición «La ciutat i Catisa», una muestra promovida por la Fundació Sa Nostra y que podrá verse, en exclusiva y hasta el 27 de septiembre, en la sala que gestiona la caja de ahorros en Maó.
Además de hablar de la historia de la empresa y de su faceta más social, la exposición pretende, también, realizar una reflexión sobre la evolución urbanística de Maó, sobre todo tras el hueco, tanto físico como «emocional», dejado por la demolición del edificio que albergaba la antigua fábrica de bisutería en el casco urbano de la ciudad del poniente insular, derrumbado durante este último invierno para su traslado al polígono insdustrial.
Además de las más de 200 fotografías de lo más variado, y de objetos alusivos, destaca un gran plafón que incluye una foto aérea de Maó (captada desde un globo hace dos semanas) en la que se visualiza ese vacío-hueco que ha dejado Catisa en la ciudad.
El plafón incluye cuatro ventanas en las que se pasan imágenes sobre la historia del edificio (también un documental sobre su demolición), con más de 50 años de vida, y una serie de mensajes y montaje que trata el tema de la evolución de la ciudad y la pérdida de la referencia que ha sido Catisa en la misma

Catisa solicita ayuda a Cardona para la localización industrial en Menorca, y no lo consigue
















CATISA pide ayudas al Govern por apostar por la localización


Antoni Monserrat (derecha) conversó con Josep Juan Cardona


Antoni Monserrat, gerente, solicita un decreto para los negocios que mantengan la producción en Balears. El conseller responde que "no hay leyes a medida"
C.V.R..Madrid
El gerente de la empresa bisutera CATISA, Antoni Monserrat, solicitó ayer al Govern balear ayudas económicas para las empresas que apuesten por concentrar su producción en las Illes Balears. El gerente de la firma menorquina realizó estas declaraciones tras anunciar el viernes la compra de los activos de la empresa bisutera INDAGUI.
Por esta operación, CATISA prevé aumentar su producción, trasladarse a una nave en POIMA y, si el negocio funciona, contratar más personal. Antoni Monserrat puso como ejemplo a Castilla y León, donde, según explicó, el Gobierno autonómico ayuda a las empresas que apuestan por mantener su producción en la comunidad. "Si lo hacen en otras autonomías, el Govern también puede aprobar un decreto para ayudar a las empresas que apuestan claramente por mantener y aumentar su producción en las Illes Balears".
Respuesta
En este sentido, el conseller de Comercio, Industria y Energía, Josep Juan Cardona, manifestó ayer durante su visita a la segunda jornada de la Exposición de Bisutería Española que, aunque celebra las buenas perspectivas de futuro de la empresa mahonesa, "el Govern debe respetar en todo momento las leyes que regulan la competencia y las subvenciones a las empresas de las Islas". Cardona defendió que "en un mercado de libre competencia, no hay trajes a medida para nadie", en referencia a la solicitud del gerente de CATISA. No obstante, el conseller recordó el compromiso del Govern con la empresa en los momentos difíciles. "Seguiremos apoyando a CATISA y al resto de empresas como lo hemos hecho hasta ahora. Esa es nuestra meta", concluyó Josep Juan Cardona.
Por otra parte, Antoni Monserrat también espera la implicación del Ayuntamiento de Maó en la nueva etapa de la bisutera. "Existen ayudas para promover el cambio de las empresas de los cascos urbanos a los polígonos industriales, por lo que esperamos el apoyo del Ayuntamiento de Maó", indicó. Dadas las buenas relaciones entre la empresa y el Consistorio mahonés, el gerente espera encontrar pronto una solución para la maquinaria adquirida a INDAGUI, que pronto llegará a Menorca. "Es necesario encontrar una solución rápida porque, dentro de un mes, tendremos 12 camiones en la puerta de la fábrica y queremos comenzar la producción en breve". Monserrat explicó que ya está recibiendo pedidos de los antiguos clientes de INDAGUI. "Ahora mismo, tenemos la estructura de dos empresas medias, y lo que queremos es crear una excelente a partir de lo que tenemos. En cuanto tengamos un espacio, comenzaremos a trabajar".
Asimismo, el gerente de CATISA recordó que el actual solar de la empresa pertenece a las familias Carretero y Timoner, tras el acuerdo a tres bandas conseguido el pasado mes de julio entre los trabajadores, las propias familias y la empresa Puck Tower. Además, el gerente quiso agradecer públicamente el papel desempeñado en el resurgimiento de CATISA por la entidad financiera Sa Nostra. "En todo este proceso de recuperación, hemos jugado con la ventaja de estar apoyados por el primo de Zumosol, que en este caso ha sido Sa Nostra", reconoció Monserrat.




Noticia a Es Diari Digital de Menorca




SOCIEDAD (Fecha 2 de Septiembre de 2007 · Número 678 · Año X)
La exposición de Catisa en la Sala de Cultura de "Sa Nostra" de Mahón levantó una gran expectación en los primeros días. Hasta el 27 de septiembre podrán verse fotografías del antiguo edificio de la empresa bisutera, antiguas muestras de pendientes, complementos, corchetes e incluso un audiovisual con testimonios de personas que vivieron los mejores y peores momentos de una empresa que estuvo a punto de desaparecer en el año 2000. Javier Borbolla es el actual Gerente de Catisa.El esfuerzo de personas como Antonio Montserrat o Rafael Timoner permitió que no desapareciese una empresa que a lo largo de varias generaciones fue un motor en la economía de Mahón.